Tal y como nos muestra Rafael Sancho Zamora en su libro digital “Gestión de la innovación. 8 claves de éxito” 2ª edición, un factor fundamental en toda empresa es la motivación de los empleados.
En tiempos de crisis, se tiende a pensar irremediablemente en la situación económica de la empresa, con mayor razón si se trata de una pyme, que dispone de recursos limitados a los que aferrarse en dichas situaciones desfavorables.
La situación económica, obviamente no debemos descuidarla ni perderla de vista, ya que es nuestro “seguro de vida” para poder llevar a cabo un proyecto empresarial. Lo que pretendemos reafirmar con este post es la necesidad de no ceñirnos exclusivamente a los números de la pyme. Hay muchos más factores necesarios en la realización de los sueños profesionales, más intangibles y etéreos, pero vitales del mismo modo. Nos referimos, por ejemplo, a la motivación.
Nuestra empresa es un proyecto empresarial innovador y ambicioso que necesita de sostenibilidad para funcionar durante un período de tiempo extenso. Pero no debemos olvidar a las personas que están incluidas dentro de dicho proyecto. Esas personas son fundamentalmente nuestros empleados, los cuales necesitan una especial dedicación por nuestra parte para rendir favorablemente y sentirse necesarios e irreemplazables en la pyme.
Para comprender el funcionamiento de la motivación en la empresa, a continuación extraemos sus cinco claves, de la publicación “Gestión de la innovación. 8 claves de éxito (2ª edición)” de Rafael Sancho Zamora:
1.- La motivación de los empleados resulta fundamental para que la pyme progrese. De ella dependen la eficacia del trabajo realizado y la imagen de la empresa.
2.- Una buena motivación de los empleados permite:
a.- Mejorar los resultados empresariales, y conseguir metas por encima de las posibilidades iniciales. Una desmotivación puede llevar al trabajador al abandono de la empresa, consumiendo tiempo en la selección y capacitación y empeorando la imagen de la empresa.
b.- Aumento de la fidelidad de los empleados al jefe y a la empresa. El jefe puede delegar labores con mayor importancia, mejorando las competencias profesionales de su personal y los empleados incrementan su colaboración en la mejora de la empresa. Esto evita conflictos laborales.
3.- La motivación del personal requiere tiempo y dinero. Debe ser tratada individualmente y resultar concordante con el grado de responsabilidad y los objetivos conseguidos por el trabajador.
4.- Para empezar: Conozca qué motiva a su personal más allá de sus salarios. Indague su opinión sobre la empresa y sus responsables. Establezca un sistema de incentivos y reconocimiento periódico. Sea generoso, recuerde que realiza una inversión.
5.- Nuevas Tecnologías y técnicas de innovación aplicadas a la motivación del personal: Sistema de gestión basado en ISO 9000 y Responsabilidad social corporativa. Buzón de sugerencias electrónico. Sistema de formación electrónica. Foro en la web de la empresa.
Como acabamos de ver, la consolidación de nuestra empresa, partiendo de un conocimiento de cada uno de sus componentes, se encuentra a nuestro alcance a través de cinco sencillos puntos estratégicos que no debemos olvidar. Si no prestamos atención a estas claves, estaremos perdiendo poco a poco a lo principales componentes de nuestra pyme: nuestro personal. Y esta realidad será evidente a los ojos de cualquier persona externa a la organización, influyendo negativamente en la imagen de la misma.
“La clave es la motivación…….Esa voluntad necesaria para autoexigirte la consecución de nuevos retos cada día”
(Roberto Parra: Director General de Deportes en la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha)
La motivación de los empleados es algo a tener en cuenta por la dirección de recursos humanos de las distintas empresas. Un empleado feliz trabaja mejor y en consecuencia aumenta tanto su productividad como la productividad de la entidad para la cual trabaja.
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